Las redes sociales, al igual que los dirigentes de los movimientos de toda índole que ocupan las calles a nivel global, informaron de su naturaleza nada más llegar a nuestras vidas; llegaron para permanecer y modificar hábitos y costumbres que estaban llevándonos a la extinción que subyace en el agotamiento estructural y sistémico de los sistemas en los que no se tiene confianza.
Esa es la realidad, las redes sociales son totalmente necesarias para el nuevo orden social actual, imprescindibles para la innovación empresarial y altamente eficientes al amparo de los mercados laborales y productivos, de quien… finalmente, dependen variables económicas tan esenciales como la competitividad y la productividad.
Fue de la mano de las redes sociales que rescatamos en su acepción más vinculada a la metafísica, conceptos como coaching, CRM y marketing, en su máxima expresión y como elementos imprescindibles para transitar por el emprendimiento como forma de vida; que es finalmente lo que se nos exige.
Fue de la mano de las redes sociales también que comenzamos a tomar conciencia que ya nada podía ocultarse; la información viaja en tiempo real y la reputación (hoy influencia) hace funambulismo con cada clic.
Y fue de la mano de las redes sociales que fuimos conscientes de integrar las siempre eficientes “plaza, precio, promoción, producto” del marketing tradicional en estrategias de neuromarketing o endomarketing, buscando siempre el mantenimiento del “win-win”… único modelo de negocio viable en Red.
Redes sociales, SEO y marketing de contenidos
Hoy tras un largo recorrido… no en la dimensión tradicional del tiempo, que ciertamente ha sido vertiginoso, pero si en el espacio tiempo que envuelve a la innovación tecnológica, somos capaces de identificar cuales son los pilares sobre los que se sustenta la influencia.
Somos capaces también, de apostar de una forma férrea por la calidad innegable que subyace en la capacidad de innovar en todos los mercados e industrias.
Ello, conjugado con la noticia y el uso eficiente de las herramientas a nuestro alcance, compone el tándem sobre el que transitan las marcas que hoy, son referentes.
El marketing de contenidos y el SEO social, han sido los últimos “Dorados” incorporados al universo red. Asistimos por un ciclo en el que el todopoderoso y siempre presente “Google” re-define la calidad y la dota de un mayor nivel de exigencia.
¿Es o no una realidad que solo a través de los contenidos una marca puede mostrar su valor agregado?
El potencial que subyace en hacer de nuestros contenidos, herramientas que nos ayuden a aumentar nuestra relevancia, aún no puede dimensionarse… sin embargo, no es un tema menor el impacto que la “nueva publicidad” está teniendo en las cifras finales que la red aporta a la economía, lo que nos lleva a reflexionar sobre el peso específico del marketing de contenidos y su indivisible relación con el SEO actual, integrado y social.
Los medios, hoy digitales, tienen en las redes sociales sus máximos aliados. Específicamente en Twitter quien, gracias a su naturaleza (devoradora de contenidos) y su esencia viral, dinámica y vinculada al concepto siempre subjetivo si hablamos del mundo virtual, del “tiempo real” dota a las marcas de funcionalidades nunca antes posibles.
El tiempo real que se nos exige hoy está directamente relacionado con la necesidad de informar y el marketing contempla un conjunto de técnicas que, subyacente en los contenidos que se publican, comparten y promocionan, constituyen en sí, la nueva publicidad.
Las estrategias de marketing hoy están latentes y explícitas en cada uno de los textos de relevancia con los que las marcas (personales y profesionales simultáneamente) se enfrentan al “juicio express” de los usuarios en red.
Cada vez más expuestos a procesos de formación constantes y con la certeza absoluta que solo a través de los aprendizajes empíricos y procedentes de la interacción, es que logramos ser más eficientes y los contenidos son el nexo de unión de los negocios en red con sus clientes.
La calidad adquiere un nuevo rol, el rol de ser responsables de la nueva publicidad, aquella que da respuestas a necesidades “en tiempo real” y que es más que suficiente para generar el dinamismo que necesitamos para ser influyentes, con cada interacción social.
Podemos concluir con la certeza de saber que, sólo conociendo las necesidades de nuestros clientes (internos y externos) es que logramos la construcción de un entramado equilibrado y eficiente.
Sólo apostando por el marketing (siempre eficiente) que aporta la calidad, el conocimiento y la innovación, desde la elaboración de nuestros contenidos (blog y redes sociales) es que podemos avanzar por la senda del crecimiento y la consolidación para nuestra marca.
Es imposible engañar al robot hoy, él es mucho más social, más humano… aprendió a identificar nuestras “debilidades” y es momento de demostrar que, trabajando en equipo y equilibrio, podemos ser mucho más eficientes.
Y… para ello, la calidad (contenidos) la conectividad (tiempo real) y la nueva publicidad ( marketing), son imprescindibles.