Google continúa fortaleciendo su lucha contra las prácticas engañosas en los resultados de búsqueda con una actualización a su política de abuso de reputación de sitios web. Este ajuste, anunciado el 19 de noviembre de 2024, busca combatir estrategias manipuladoras utilizadas por terceros para beneficiarse de señales de clasificación de sitios anfitriones, asegurando que los usuarios encuentren información útil y confiable.
¿Qué es el abuso de reputación de sitios web?
El abuso de reputación de sitios ocurre cuando contenido de terceros se publica en un sitio anfitrión con el propósito de explotar las señales de clasificación ya establecidas de dicho sitio. Esto permite que el contenido manipulado obtenga un mejor posicionamiento en los resultados de búsqueda, aunque por sí solo carezca de la calidad o relevancia necesaria. Esta práctica genera una experiencia negativa para los usuarios, al distorsionar el propósito de los algoritmos de búsqueda de Google.
Por ejemplo, imagina que un sitio web con una buena reputación permite a un tercero publicar contenido cuestionable o poco relevante. Aunque el contenido no cumple con los estándares de calidad, se posiciona bien debido a la reputación del sitio anfitrión. Esta táctica no solo perjudica la calidad de los resultados de búsqueda, sino que también socava la confianza en las plataformas legítimas.
Cambios en la política
Desde el lanzamiento inicial de esta política, Google ha revisado diversas situaciones donde hay grados variables de colaboración entre el anfitrión y los terceros, como acuerdos de licencia o propiedad parcial. Tras este análisis, Google determinó que cualquier tipo de participación del anfitrión no justifica el uso abusivo de las señales de clasificación del sitio.
La nueva redacción de la política deja en claro que:
El abuso de reputación de sitios es la práctica de publicar páginas de terceros en un sitio con el intento de manipular las clasificaciones de búsqueda aprovechando las señales de clasificación del sitio anfitrión.
Además, Google no se limitará a evaluar las declaraciones de los propietarios del sitio sobre cómo se produjo el contenido, sino que utilizará una combinación de métodos para identificar abusos. Los sitios que violen esta política recibirán una acción manual por spam y serán notificados a través de la consola de búsqueda. Posteriormente, podrán solicitar una reconsideración tras solucionar los problemas.
¿Qué contenido está permitido?
No toda publicación de terceros es automáticamente considerada abuso de reputación. Google proporciona más detalles en su página de políticas de spam sobre las prácticas que sí son aceptables, como colaboraciones legítimas que no buscan manipular el posicionamiento.
Por otro lado, Google está desarrollando sistemas para tratar secciones específicas de un sitio como entidades independientes, especialmente si son radicalmente diferentes del contenido principal del sitio. Esto significa que las subsecciones no recibirán automáticamente un impulso en el ranking debido a la reputación general del sitio. Aunque esto puede generar cambios en el tráfico de ciertas áreas, no implica una penalización, sino una medición más precisa de la calidad de cada sección.
Implicaciones para los propietarios de sitios
Los propietarios deben enfocarse en estrategias de SEO ético, priorizando la experiencia del usuario en lugar de tácticas para engañar a los motores de búsqueda.
Recomendamos a los creadores de contenido familiarizarse con estas nuevas directrices y revisar cualquier práctica que pudiera ser considerada manipuladora. La transparencia y la calidad son elementos esenciales para mantener una buena relación con Google y, sobre todo, con los usuarios.
Google continúa trabajando para garantizar que sus sistemas prioricen la información más útil y relevante, nivelando el campo de juego para todos los sitios. En última instancia, esto no solo beneficia a los creadores que siguen prácticas justas, sino también a los usuarios que buscan información confiable en la web.