Neuralink es una empresa de Elon Musk que usa parches en el cerebro con el objetivo de mejorar su funcionamiento, tratar enfermedades e incluso trabajar con prótesis y ordenadores usando solamente el pensamiento.
Los resultados los vimos hace unos meses cuando un mono comenzó a jugar a Pong sin usar las manos, solo con los cables saliendo del cerebro, un experimento que generó cierta polémica al descubrirse que algunos animales murieron poco después.
El caso es que el cofundador y expresidente de Neuralink, Max Hodak, ha creado la empresa Science Corp, también especializada en interfaz entre cerebro y ordenador, con 160 millones de dólares de inversión, aunque en este caso con una ventaja muy grande: no necesita perforar la cabeza, lo hace todo con emisión de luz hacia el cerebro (entrando por el ojo).
El sistema propuesto utiliza la luz enviada a través del nervio óptico del paciente para transmitir información, algo que podría servir tanto para tratar a pacientes con discapacidades extremas como para, en un futuro, mejorar la cognición y las capacidades de cálculo de los humanos.
Ya tienen un prototipo al que llaman «Science Eye«, y es capaz de tratar la pérdida de visión en conejos. El sistema usa una película LED delgada, de 2 milímetros de ancho, implantada en la parte superior de la retina, y es capaz de procesar patrones que se le envían de forma inalámbrica.
Aún faltan algunos años para poder realizar pruebas en humanos, ya que es necesario obtener la aprobación de la FDA.
Creen que en el futuro se podrán reemplazar las gafas, así como las de Realidad Virtual, solo con un pequeño implante en el ojo.
Mientras que Elon Musk cree que Neuralink podría transformar a los humanos en cyborgs, Hodak de momento solo piensa en tratamiento de enfermedades y aumento de nuestra capacidad de cálculo, que ya es mucho.