El movimiento de los océanos genera una enorme cantidad de energía que podría aprovecharse. Ya hay dispositivos que obtienen energía de las olas del mar, pero hay un nuevo prototipo que podría obtener el doble.
Estamos hablando de una energía prácticamente ilimitada, limpia y renovable.
El prototipo se ha presentado en la revista Applied Energy, donde hablan de la dificultad que enfrentan los ingenieros para desarrollar nuevas soluciones tecnológicas capaces de extraer de manera eficiente este poder natural de las olas. No es fácil poner un dispositivo en la superficie del océano y esperar que sobreviva fácilmente, por lo que todo lo que se está haciendo en ese sentido es puramente experimental, la gente prefiere poner centrales eólicas en plataformas. Las olas ocurren el 100% del tiempo, es energía generada constantemente, mientras que la solar y eólica es intermitente.
El invento es un nuevo convertidor de energía de las olas presentado por la Universidad RMIT. Usa un diseño de turbina dual que se mantiene ‘sincronizado’ con el movimiento del océano.
Hasta ahora los inventos eran diversos, como un convertidor similar a una boya que recolecta energía a medida que la superficie del océano se mueve hacia arriba y hacia abajo. En este caso el proceso de fabricación e instalación es rentable, pero es un dispositivo muy sensible, que requiere una sincronización ultraprecisa con el movimiento de las olas entrantes para optimizar la eficiencia de la recolección de energía. Esto generalmente requiere una serie de sensores, procesadores de control y actuadores, lo que hace que sea todo mucho más complicado, eliminando el alto rendimiento y aumentando la cantidad de errores.
El nuevo prototipo no necesita una tecnología de sincronización muy avanzada, porque flota hacia arriba y hacia abajo con el oleaje natural, sincronizándose siempre con el movimiento de las olas. De esta forma puede duplicar la potencia de salida obtenida de las olas del océano, en comparación con otras tecnologías experimentales de absorción puntual.
El generador de energía se coloca por encima de la línea de flotación de la boya, por lo que el agua de mar se mantiene separada y evita la corrosión.
Por desgracia aún faltan años para su implementación a escalas comparables a la energía solar o eólica, pero lo importante es ir avanzando con el tema para poder eliminar finalmente todo lo que no sea limpio y renovable.