Los discos SSD son actualmente la principal alternativa a los clásicos discos duros magnéticos, gracias a la mayor resistencia y al superior rendimiento que en general ofrecen.
Como una primera muestra de las unidades de almacenamiento que veremos con más frecuencia en el futuro, llegó GigaDrive, autoproclamado como “el SSD externo más rápido del mundo”.
18 veces más veloz que un SSD
Con esta sorprendente estadística se presenta este novedoso disco SSD externo, presentado en una campaña de crowdfunding, a través de IndieGoGo.
La recepción fue claramente positiva, pues, a un mes del cierre del programa de financiamiento, el proyecto ya ostenta una recaudación de más del 2000% de su meta.
GigaDrive utiliza las tecnologías Thunderbolt 4 y USB4 para el intercambio de datos. Dichas soluciones, que veremos más a menudo en un tiempo próximo, permiten a GigaDrive alcanzar velocidades estables de lectura y escritura de hasta 2.800 MB/s en equipos que soporten alguna de estas tecnologías. Estas unidades no requieren software adicional ni utilizan nubes como intermediarios.
Además, los dispositivos son resistentes al agua, al polvo y a los golpes. Esta protección permite usar el disco sin sobresaltos en condiciones extremas o inusuales, como en casos de exposición al agua, polvo o caídas fuertes.
Gigadrive también cuenta con protección para el sobrecalentamiento, dando solución así a un problema común en las unidades de almacenamiento, cuando manejan grandes volúmenes de datos. El rol fundamental en esta tarea lo juega la carcasa de aluminio del dispositivo, que junto con darle una identidad elegante y futurista a su diseño, actúa como disipador. De esta forma, además de preservar el estado del disco y los datos contenidos, se conserva de manera estable el rendimiento del mismo.
GigaDrive fue presentado en tres variantes de capacidad; 1TB, 2TB y 4TB. Todos los modelos cuentan con un chip de caché DRAM, que procesa las transferencias para que los archivos puedan copiarse simultáneamente y de manera eficiente.
Fuera de actuar como una bóveda personal de archivos, tal como la mayoría de las alternativas de almacenamiento a las que podemos acceder, GigaDrive puede, gracias a su potencia, ser útil para trabajos más avanzados.
Por una parte, para el trabajo audiovisual este disco puede ser un buen aliado. Gracias a sus altas velocidades de transferencia, puede almacenar imágenes RAW en 8K directamente desde algunas cámaras, como la serie Blackmagic. También, puede utilizarse como unidad de respaldo, para evitar el cambio constante de tarjetas de memoria.
En otros casos, para el entretenimiento, la presencia de GigaDrive también puede ser un aporte. Es posible afirmar esto considerando que hay juegos que en sus versiones para ordenador ya superan los 200 GB y que los formatos de vídeo de mayor resolución, además de pesar más, requieren de una mayor velocidad de transferencia para reproducirlos fluidamente.
Este particular disco pesa sólo 74 gramos y mide 114 x 37 x 12.5 mm. Su uso se orienta a las plataformas Windows, Mac, Linux y Android.
La mencionada campaña de financiamiento a través de crowdfunding, mediante la que se dio a conocer esta iniciativa en marzo, ha sido todo un éxito. Aún queda un mes para que cese el plazo original y el monto esperado fue superado con creces.
Durante mayo se desarrollarán las primeras pruebas con estos discos, para más tarde, en junio, comenzar su producción masiva.
Puedes encontrar más información sobre GigaDrive en el sitio de su campaña en IndieGoGo.