D-Link, conocido fabricante de soluciones de redes, comunicaciones y videovigilancia, acaba de lanzar dos nuevas cámaras de seguridad, la DCS-8526LH para el interior (imagen de arriba) y la DCS-8627LH para el exterior (imagen de abajo), que además de las funciones habituales de este tipo de dispositivos también cuenta con compatibilidad con los dos asistentes virtuales más populares del momento: Alexa, de Amazon, y el Asistente de Google.
Esta integración abre muchas más posibilidades, a lo que se añade también la capacidad de que los sensores de movimiento y de sonido de estos modelos puedan interaccionar con los enchufes inteligentes de la propia marca, dando lugar a que, por ejemplo, se pueda encender luces ante la presencia de personas.
Con aspectos comunes
Por lo demás, ambos también tienen en común la grabación de vídeo a 1080p a 30fps, el modo de visión nocturna, la posibilidad de llevar las grabaciones a la nube de mydlink cloud recording hasta 24 horas o incluso la posibilidad de guardar localmente las grabaciones a través de una tarjeta micro SD, aunque aquellos que lo deseen, también podrán llevar sus grabaciones a un dispositivo externo, como un NAS por ejemplo.
Para aquellos que piensen que estas cámaras son dispositivos a instalar por profesionales, indicar que desde la compañía han hecho todo lo posible para facilitar que cualquier interesado lo tenga fácil para poder configurarlas, donde básicamente tendrán que escanear los ahora populares códigos QR disponibles en sus unidades desde la aplicación mydlink y seguir unos sencillos pasos que aparecerán en pantalla.
Y también con sus diferencias
Además, hay que añadir que estos modelos funcionan con redes WiFi, aunque DCS-8526LH, pensado para su uso en interiores, también admite conexión por cable mediante conexión por ethernet, e incluso con giros e inclinaciones motorizados para apuntar al área de visión a vigilar.
Además, cuenta con un sistema de Inteligencia Artificial a través del cual será capaz de reconocer los movimientos de personas frente al de los objetos, evitando activar la alarma en casos de falsos positivos.
Y hablando de diferencias, también hay que indicar que el modelo para exteriores, DCS-8627LH, cuenta con una luz integrada de hasta 400 lúmenes, con un alcance de hasta siete metros, que podrá encenderse y apagarse de forma manual o programada, o incluso cuando ocurran algunas circunstancias concretas (detección de movimiento o ante sonidos extraños); certificación IP65, para hacer frente a las diferentes condiciones climatológicas; sensor PIR para la detección precisa de movimientos, e incluso alberga una alarma de 100 dB.
Respecto a los precios, estos modelos ya están a la venta por 165 euros y 179 euros respectivamente.
Crédito de las imágenes: D-Link