Microsoft ha hecho las paces con Linux, de hecho ha reconocido que se equivocó durante todos los años en los que tenía declarada la guerra.
Ahora no solo emite disculpas, también integra Linux dentro de Windows, y hoy dan un paso más: promete mejorar drásticamente su Subsistema de Windows para Linux (WSL) con soporte de aplicaciones GUI y aceleración de hardware de GPU.
Lo que pretende es tener un núcleo Linux completo en Windows 10, y ahora planea admitir aplicaciones Linux GUI que se ejecutarán junto con las aplicaciones normales de Windows. La idea es que los desarrolladores ejecuten entornos de desarrollo integrado de Linux (IDE) junto con las aplicaciones normales de Windows.
Antes ya se podía hacer algo así, ejecutando aplicaciones GUI de Linux dentro de Windows utilizando previamente un servidor de terceros, pero eso hacía que el rendimiento fura muy bajo. Microsoft promete resolver esto también. Windows 10 pronto obtendrá soporte adicional para la aceleración de hardware de GPU con herramientas de Linux.
La aceleración de hardware de GPU comenzará a aparecer en los próximos meses para Windows 10 Insiders en Fast Ring, y Microsoft planea compartir más información sobre el momento para el soporte de la aplicación GUI de Linux a finales de este año.
Está claro que quieren enfocarse en los desarrolladores que desean usar Windows como un cuadro de desarrollo, un paso más para dejar claro que no solo hay admiración, también hay intención de seguir luchando con la compatibilidad.