El nuevo año arranca con cifras muy positivas para el reciente sistema operativo de Microsoft, Windows 10 que, acorde a un nuevo informe de Net Marketshare, se convierte en el sistema operativo más popular del mundo, con una participación del 39,2% de los equipos de escritorio, llegando al 45% si sólo se tienen en cuenta equipos de escritorio bajo Windows.
Llegar hasta aquí no le ha sido fácil a Microsoft, habiendo tenido que esperar tres años y medio para poder superar a Windows 7, con un año de retraso a lo que indicaban los pronósticos, y donde Windows 7 aún disfruta de una participación más que aceptable, del 36,9%.
Se da la curiosidad, a tenor del informe, de que dentro del Top 5 se encuentra también Windows XP, ocupando el cuarto lugar, por encima de Windows 8.1. Y es que a los usuarios les ha ido costando migrar a versiones superiores de Windows, cuando siempre han visto que las versiones que utilizaban les eran más que suficiente para sus necesidades.
Quizás, detrás de este éxito se pueda encontrar la concepción de Windows 10 como un sistema operativo que pueda estar presente en una diversidad de dispositivos más allá de los equipos de escritorio, pudiéndose encontrar fácilmente en dispositivos híbridos o convertibles.
También se encuentran el impulso de le están dando las compañías, que apuestan por migrar hacia Windows 10 ante el final de soporte marcado para Windows 7, fijada para el año 2020, teniendo que pagar una tarifa mensual si querían disponer de soporte extendido.