En un artículo publicado en Nature Biotechnology se ha mostrado el trabajo que realizan pequeños robots autónomos para curar el cáncer en ratones.
Son nanorobots de ADN que buscan tumores e inyectan medicamentos para cortar su suministro de sangre, lo que acaba por matar a las células mortales.
Los nanorobots se inyectan por vía intravenosa e inducen trombosis intravascular, lo que produce necrosis tumoral e inhibición del crecimiento tumoral, tal como especifican en TC.
En estos robots el ADN programado se pliega sobre sí mismo como si de origami se tratara, desplegándose posteriormente antes de comenzar su trabajo. En la demostración se comprobó que funcionó bien con tumores humanos de cáncer de mama dentro de los ratones: en 48 horas comenzaron a crear coágulos de sangre en los vasos del tumor y cortaron su suministro de sangre, sin afectar a otras partes del cuerpo.
Las pruebas se han realizado también en cerdos miniatura, algo necesario para verificar si con animales más grandes los bots siguen sin dañar partes del cuerpo no afectadas por el tumor.
Aunque aún falta mucho para poder probar el sistema en seres humanos, parece que estamos en el camino correcto para encontrar finalmente la cura de una de las enfermedades que más muertes causa en todo el mundo.