Han buscado inspiración en las nuevas tecnologías, tal como menciona PM, por lo que piensan desarrollar una tecnología que aprovecha el potencial de las imágenes 3D.
Quieren utilizar este método, para detectar cualquier tipo de daño o imperfecciones que pueden surgir a medida que la pintura va envejeciendo, como por ejemplo las pinturas al óleo del siglo XX, debido a las propiedades de los materiales utilizados.
Por ejemplo, piensan aplicar esta nueva herramienta de conservación, aún en investigación y desarrollo, para evaluar cierto tipo de daño que están sufriendo una serie de pinturas de Georgia O’Keeffe, y limitar su evolución.
Como parte de la dinámica que desean desarrollar con esta nueva tecnología de imágenes en 3D, los expertos piensan crear un sistema, que se podrá consultar online, y pueda servir a cualquier experto en conservación artística.
Es una iniciativa interesante, dirigida por el Instituto de Arte de Chicago, el Museo Georgia O’Keeffe, y la Universidad Northwester. Para la investigación y desarrollo de este proyecto, de 2 años, han recibido una subvención de $ 350,000.