Uno de los problemas existentes en las prótesis es la insensibilidad. Por mucho que consigamos avanzar en este sector, ofreciendo sensaciones en la punta de los dedos artificiales, o creando sistemas integrados con los nervios, aún estamos lejos de poder verlo en nuestro día a día.
Hoy hablaremos de un nuevo avance en este sentido: han creado una piel artificial que es capaz de detectar cambios de temperatura, y eso es una excelente noticia para quien tiene un miembro artificial y quiere recuperar esa sensación.
El invento, presentado en el Instituto Federal Suizo de Tecnología en Zúrich y el Instituto Tecnológico de California, podría usarse también en la medicina, para usarse en las vendas y detectar infecciones en las heridas, ya que cuando una se infecta, su temperatura cambia.
Se trata de una película que imita a la piel de los crótalos, serpientes que notan la presencia de presas calientes usando este mecanismo. Explican los detalles en Amazing y caltech.edu:
[…] cuentan con un grupo de canales iónicos en la membrana celular de las fibras nerviosas sensitivas y se produce una expansión de los diminutos detectores naturales a medida que la temperatura aumenta por la sutil influencia de una presa cercana. Esta dilatación permite fluir a los iones de calcio, desencadenando impulsos eléctricos.
Ya existen pieles artificiales semejantes, pero detectan menos de una décima de grado en un rango de 5 grados, mucho menos que la nueva, capaz de trabajar en un rango de 45 grados. Los investigadores quieren ahora ampliar el rango hasta los 90 grados centígrados, ampliando así su uso, ya que podría, además de usarse en medicina y robótica, utilizarse en aplicaciones industriales (sensores térmicos en la electrónica de consumo, por ejemplo).
Aquí lo tenéis en vídeo:
