Cada día se realizan miles de transacciones, dentro y fuera de Internet, que pueden considerarse fraudes, ataques fraudulentos que suelen ser denunciados a los bancos, empresas de tarjetas de crédito y otras plataformas, como Paypal.
Existen hoy muchos profesionales especializados en el análisis y detección de operaciones fraudulentas, y muchos sistemas informáticos que intentan prevenirlas bloqueando las transacciones antes de que ocurran, ese es el motivo por el que, cuando alguien roba nuestra tarjeta de crédito e intenta hacer un pago desde el otro lado del mundo, a menudo el pago no se realiza y recibimos una alerta de la empresa.
Ahora hay una compañía que está trabajando en un algoritmo mucho más avanzado en este sector. Su nombre es Fraugster, una startup alemana e israelí que ha recaudado 5 millones de dólares en fondos para poder continuar desarrollando una tecnología que aprende sola, un algoritmo de inteligencia artificial que analiza millones de transacciones por día y aprende con cada una de ellas.
Comentan en TC los detalles: fue fundada en el año 2014 por Max Laemmle, quien anteriormente fue fundador también de la compañía de pagos Better Payment, y Chen Zamir, que trabajó cinco años en PayPal. Su tecnología es capaz de anticipar ataques fraudulentos incluso antes de que sucedan, reduciendo el fraude en un 70 por ciento en tan sólo 15 milisegundos.
Para su funcionamiento usa datos de transacciones como nombre, dirección de correo electrónico, dirección de facturación y envío, latencia IP para medir la distancia real desde el usuario, tipo de conexión IP, distancia entre pulsaciones de teclas y la coincidencia de nombres de correo electrónico y muchas variables más (más de 2.000). Con esa información pueden analizar la historia detrás de cada transacción y decir con precisión qué transacciones son fraudulentas y cuáles no, con información de por qué se bloqueó o aceptó una transacción específica.
Ya que el motor se reinventa con cada nueva transacción, la esperanza es ser prácticamente imbatible en un futuro próximo, eliminando así el fraude en los pagos.