Estamos acostumbrados a asociar coches de policía con interminables persecuciones a alta velocidad entre las calles de las grandes ciudades, y esa imagen pocas veces puede asociarse a los coches eléctricos. Aún así, las cosas están cambiando: ni los coches de policía viven en persecuciones ni los coches eléctricos pueden apartarse de este sector, y en la policía de Los Angeles lo acaban de demostrar.
Han presentado su nuevo proyecto para hacer la ciudad «más eléctrica»: usarán el BMW i3 para el cuerpo de policía durante un año, resultado de un acuerdo con BMW según el cual se alquilarán 160 vehículos, especialmente diseñados para que puedan reconocerse fácilmente como coches policiales, según vemos en la galería de fotos de USAtoday.
El alcalde de la ciudad, Eric Garcetti, quiere transformar a Los Angeles en la ciudad más ecológicamente correcta de Estados Unidos, y este es un paso más, aunque de momento no se arriesga a aumentar el contrato por más tiempo, prefieren probar unos meses antes de verificar si realmente atiende a sus necesidades del día a día.
BMW lo presentó como su primer coche de serie con cero emisiones. Consume en ciudad 138 MPGe (111 en carretera), y cuenta con carrocería de fibra de carbono para mejorar el consumo de energía. Es capaz de andar 130 km con una sola recarga, y sus principales mercados son Estados Unidos, Alemania, Noruega y el Reino Unido, donde llegaron a venderse 25.000 unidades en mayo de 2015.