El bloqueo afecta a los usuarios de Windows desde hace meses, y afectará a los de mac a partir de julio.
Así lo informan en el blog de Chrome, donde indican que ha sido necesario tomar esta actitud para evitar la distribución de plugins maliciosos a lo largo y ancho de internet.
La instalación de extensiones fuera de chrome store se ha permitido para ofrecer la posibilidad de probar extensiones durante su etapa de desarrollo, pero esta puerta abierta se ha aprovechado en varias ocasiones para ofrecer virus y malware de todo tipo, motivo por el cual se cerrará esta opción. Todos los usuarios de Windows tienen ya bloqueada la posibilidad de instalar plugins que no estén listados en la chrome Store, y dentro de dos meses llegará el turno a los usuarios de Mac (no se han pronunciado sobre los usuarios de Linux).
Los programadores podrán seguir probando extensiones durante el desarrollo, pero tendrán que hacerlo bajo estas políticas y usando la instalación en su propio site, tal y como vemos en developer.chrome.com.
Un mal necesario para poder garantizar la seguridad de los usuarios, evitando así que se instalen archivos de origen desconocido.