Así lo informan en defensetech.org, donde han tenido acceso a las declaraciones del jefe del Comando de Operaciones Especiales de EE.UU, el almirante William McRaven, que confirmó que ya existen tres prototipos sin alimentación, llamados TALOS (Tactical Assault Light Operator Suit), que podrán probarse dentro de pocos meses con el objetivo de implantarse definitivamente en agosto de 2018.
Ese traje, si se hace correctamente, dará lugar a una mejora revolucionaria en la supervivencia y la capacidad de los operadores especiales.
La armadura incluirá un exoesqueleto, armadura de cuerpo completo y un sistema inteligente que mostrará información contextual. La idea del proyecto surgió hace varios años, después de que un miembro de las fuerzas de operaciones especiales fuera asesinado a tiros mientras entraba por una puerta, hecho que comenzó a mover a los especialistas, quienes contactaron con unas 56 empresas, 16 organismos gubernamentales, 13 universidades y 10 laboratorios nacionales que están trabajando en el programa.
La tecnología ya existe, problemas de presupuesto parece que no hay, y la necesidad es obvia en muchos casos. Esperemos ahora que el sentido común haga su parte.
Aquí os dejamos con uno de los muchos vídeos sobre TALOS que existen en Youtube: