…Los 10 mandamientos del magnetismo en el marketing de contenidos… sí, sí… no nos vayamos a creer que eso del marketing mix es únicamente aplicable a las intervenciones en las redes, los contenidos, son cada vez más, el origen de las relaciones con los clientes.
Atraer las emociones ajenas se ha transformado en un privilegio al alcance de todos que muy pocos saben aprovechar en su totalidad y es ahí donde se gestan las crisis y los fracasos de las estrategias.
Sabemos que en el momento actual no es tan relevante lo que vendamos, sino las razones que lo sustentan, las demandas que satisfacen y el tipo de necesidad a la que apunta nuestro proyecto de negocio. Sabemos que es indispensable encontrar esa cualidad única y genuina que diferencia a nuestra marca del resto y sabemos que el camino para lograrlo, no puede mantenerse alejado de los aprendizajes.
Pero… ¿cómo aprendemos? De igual forma que nos comunicamos sin restricciones, sin barreras que nos impidan el acceso a la información, hoy somos capaces de realizar una transformación de nuestra naturaleza y enfrentar el nuevo modelo con la apertura que éste nos demanda.
Nos comunicamos porque necesitamos hacerlo y cuanto más complejas sean las condiciones de vida a las que nos enfrentemos, más nos comunicaremos porque más necesitaremos del otro para ser eficientes y…” necesarios”.
Las marcas hoy deben ser necesarias porque sólo desde esa perspectiva se logra desatar una emoción y para ello, tenemos las palabras, aquellas con las que llevamos a cabo todo tipo de procesos cuyo origen está en el magnetismo.
Los contenidos, origen de los vínculos, de los aprendizajes, de las alianzas, origen de las nuevas ideas y respuesta a las necesidades ajenas. El contenido es hoy quien nos marca las pautas para identificar el magnetismo con nuestras “redes” y hacer de ello, nuestro valor agregado.
1. Tu opinión, única. Desde siempre, los mensajes únicos han sido poderosos imanes de atención.
2. Compara y aprende. Eje central de los aprendizajes son las comparaciones, una forma única de mostrar diferencias, similitudes, ventajas y desventajas… los 4 pilares de la elección.
3. Quien no se equivoca, no aprende. Desde el colegio que nos transmiten ese mensaje, lo importante es intentarlo, focalizarse, todos nos equivocamos y es ahí donde se activan nuestros procesos de aprendizaje. ¡Aunque en este ciclo sería bueno hacerlo mejor desde el principio y ahorrarnos algún que otro tropiezo conocido!
4. Habla con los demás. Conocer qué hacen y cómo lo hacen aquellas personas que han triunfado, que son influyentes o que han gestionado su reputación de una forma expuesta y de calidad, es indispensable para aprender sobre otras formas de hacer las cosas.
5. Comparte lo que sabes. Hace mucho tiempo ya que la información dejó de ser una divisa exclusiva de los “poderosos” hoy, viaja libra y sin barreras por las redes a la espera que un clic se detenga en ella y la utilice para crear. Cuando compartes tus experiencias, conocimientos y procedimientos eficientes, permites que otras personas los conozcan y quizá, puedan encontrar un nuevo camino o mostrarte uno a ti… ¡Aprendemos en cualquier caso!
6. El poder del cuenta cuentos. La lectura sigue siendo para muchos, fuente inagotable de información y placer. Existe un target muy numeroso en la red de personas procedentes del mundo analógico, el poder de la novela y los cuentos sigue estando vigente, desatar una emoción a través de una historia es una fórmula que siempre ha funcionado ¡Aunque no lo parezca, somos seres emocionales!
7. Enseña, de verdad. Si tu opinión se sustenta e la experiencia, el conocimiento y la especialización, debes mostrarles a los demás quienes son tus guías y líderes, analiza qué hacen los demás e invita a tus lectores a realizar sus análisis también.¡ Tienes una incalculable fuente de información para futuras estrategias de contenidos aún por explorar!
8. Haz de tus errores material didáctico. No hay nada que atraiga más que sentirse identificado en la historia de otra persona. Partiendo de la premisa esencial que los errores no son quienes destruyen nuestra reputación, mostrarlos una vez vividos y resueltos, ejerce un poder magnético.
9. Recuerda que el lector está online. Cada vez más necesitamos ser directos con los mensajes y complementar con contenido de naturaleza audiovisual. El lector está online, en tiempo real y expuesto a un bombardeo de información apuntando a sus emociones. Entrega mensajes concretos.
10. Conciencia social. Indispensable, no tenemos aún una conciencia sobre la importancia de contar con un talento individual si buscamos posicionaros como una marca líder en nuestro mercado. ¡Los contenidos son el origen de la acción social!
Y finalmente un consejo más… mide, inventa, innova, atrévete, siempre, la respuesta de tus lectores ante una estrategia concreta, no podemos sucumbir nuevamente a la complacencia y el alimento de nuestro ego… son los clientes quienes deciden qué les emociona. Como decía Franklin D. Roosevelt: “Siempre que te pregunten si puedes hacer un trabajo, contesta que sí y ponte enseguida a aprender como se hace”.