El equipo de Apple ha estado evaluando diferentes ideas y dinámicas para el diseño de un teclado especial, según la patente que se ha hecho pública estos días.
El polvo no es el único elemento que puede causar estragos en el correcto funcionamiento de un teclado… líquido, migas y una serie de elementos son expuestos por aquellos usuarios que no se despegan del equipo, ni para comer.
Conociendo esta dinámica, Apple presentó algunas soluciones para que el teclado de la MacBook no sea vulnerable al descuido de los usuarios. Tal como se puede leer en el registro de la patente, se exponen diferentes mecanismos y estructuras que podrían impedir la entrada de contaminantes.
Por ejemplo, se sugieren membranas que bloqueen la entrada, cepillos que protejan los espacios de las teclas, y un mecanismo que permitiría utilizar la presión de las teclas para expulsar cualquier elemento que se haya filtrado dentro del teclado.
Es decir, el teclado tendría un conjunto de barreras que mantendrían a los elementos lejos de la zona de riesgo, para su correcto funcionamiento, y como segundo paso, se expulsarían utilizando las teclas. Así que internamente, el teclado no sufriría ningún tipo de daño.
Si bien no hay ninguna certeza que todas estas ideas se hagan realidad en algún momento, es un línea interesante que ya sabemos que Apple está investigando, para darle más vida a los teclados.