Durante las últimas horas se realizó el mayor descubrimiento científico de los últimos tiempos, se confirmó la teoría que Einstein formuló hace 100 años: la existencia de ondas gravitacionales.
LIGO Scientific Collaboration (LSC) lo confirmó, y diferentes medios han escrito sobre el asunto desde diferentes puntos de vista, aunque la mayoría de las dudas entre los lectores continúa siendo la misma: ¿y ahora qué?.
Aunque se trata de uno de los descubrimientos físicos más importantes del siglo (fueron localizadas por primera vez en el observatorio de Livingston el 14 de septiembre de 2015, pero han sido necesarios varios estudios posteriores para confirmarlo), no deja de ser una minúscula señal proveniente de las nubes de Magallanes causada por la colisión de dos agujeros negros a 1.300 millones de años luz de la tierra. Parece algo minúsculo como para tener un efecto inmediato en nuestro día a día, pero vamos a ver el motivo por el cual la importancia es mayor de lo que parece con cinco preguntas y respuestas.
1 – ¿Se trata únicamente de una confirmación de una teoría?
En realidad se sospechaba que estas ondas existían desde hace mucho tiempo, pero ahora que se ha confirmado su existencia, es posible afinar el oído para prestar más atención y obtener información sobre regiones del espacio invisibles de otra forma. Sí, por un lado se trata únicamente de la confirmación de una teoría, pero por otro lado ha abierto una ventana de observación al universo que hasta ahora ni existía. Es como tener un nuevo sentido, una nueva forma de percibir la realidad.
2 – ¿Qué son exactamente esas ondas?
Todo cuerpo, por el simple hecho de tener masa, deforma el espacio que hay a su alrededor, como si fuera una bola encima de una sabana. Los cuerpos que están cerca son atraídos hacia la bola porque «caen» en la curva generada por la misma. Esto es lo que sabemos de la gravedad. Ahora sabemos que todos los cuerpos emiten ondas solo por el hecho de tener masa, por lo que pueden detectarse analizando esa deformación de lo que llaman «el espacio tiempo».
3 – ¿Qué tiene que ver el espacio-tiempo con todo eso?
Para conocer la relación entre el espacio, el tiempo y la masa habría que dar una clase de relatividad, pero podemos resumir que un cuerpo muy pesado (un agujero negro, por ejemplo) no solo deforma el espacio a su alrededor atrayendo otros objetos, también «deforma» el tiempo. De hecho todos los cuerpos deforman el espacio tiempo a su alrededor, pero solo se percibe cuando hablamos de objetos extremadamente pesados. principiamarsupia.com lo explica bien en su artículo «Cómo explicar ondas gravitacionales a tu abuela».
4 – ¿Significa eso que los viajes en el tiempo son posibles?
No exactamente. El descubrimiento de estas ondas permiten abrir nuevas lineas de investigación para conocer más sobre el espacio, sobre el tiempo y sobre las dimensiones, pero lo de los viajes en el tiempo es otra historia.
Es como si hubiéramos descubierto el fuego y alguien preguntara: ¿significa esto que los motores de combustión son posibles?… Es un primer paso, un primer ingrediente en un mundo extremadamente desconocido, ahora hay que trabajar mucho para poder saber más sobre el tema.
5 – ¿Cómo cambiará esto nuestro día a día en las próximas décadas?
Para la mayoría de la población: en nada, pero para los que estamos interesados en los descubrimientos científicos y en la astronomía, en mucho, ya que aparecerán datos sobre regiones hasta ahora «oscuras» del universo, podremos «escuchar» eventos que ocurrieron hace billones de años, podremos comparar datos con otros instrumentos, podremos ver el avance de la ciencia y la tecnología para obtener más datos a partir de estas ondas… es posible que dentro de 500 años tengan una aplicación práctica en el día a día (un generador de ondas gravitacionales que deforme el espacio tiempo de nuestro alrededor, por ejemplo), pero de momento, solo es un muy primer paso.